sábado, 31 de marzo de 2018

Te admiro

Te admiro.
Admiro tu capacidad de no rendirte. Admiro tu habilidad para cambiar los días. Admiro tu sentido común, a veces menos común, pero siempre con sentido. Admiro tu sonrisa mañanera del lunes, tu canción de buenos días, tus motivos para ponerte en pie. Admiro que te caigas y sepas caer, admiro que te levantes habiendo aprendido. Admiro cómo luchas y cómo crees, cómo mueves los hilos. Admiro tu capacidad de crecer, de cambiar y avanzar, de reinventarte y darle una vuelta más. Admiro cómo juegas, cómo ries. Admiro cuando te haces pequeña y te mueve el aire, cuando no eres de nadie y a la vez tan tuya. Admiro tus silencios porque dicen más que mis palabras, admiro cuando no sigues el camino recto, cuando te pierdes y nos encontramos. Admiro cuando me convences de tener razón aunque ambos sepamos que no. Te admiro por decidir estar a mi lado teniendo un mundo entero para elegir.  Te admiro porque tus abriles brillan más que mis septiembres.
Te admiro porque no te rindes, porque siempre ganas aunque perdamos. Te admiro porque eres vida y fluyes. Te admiro porque eres tú, dos letras que mueven el mundo. Feliz cumpleaños.
Te quiero.


Haz que este baile merezca la pena
Yo haré lo propio con esta canción
Y si al final no hay más que comedia
Deja que el río nos lleve a los dos.

lunes, 5 de marzo de 2018

Actitud

Vivimos tan deprisa que nos olvidamos de vivir. El tiempo corre, el tiempo no espera. La vida sigue, no hay tregua. ¿A qué esperas? No tenemos tiempo para digerir nuestras emociones. El fracaso está mal visto, mejor lo escondemos. No llores, vendrán tiempos mejores. Demasiado éxito se sube a la cabeza, disimula. Siempre hacia adelante. La comida rápida, el café cortado, los viajes en AVE y las canciones de dos minutos. Ah, y los abrazos cortos y las despedidas mejor por whatsapp. Que no perdamos tiempo, aquí nadie espera.
Jugamos a ver el fallo ajeno antes que el propio. Somos jueces antes que acusados. Actores de una meticulosa escena en que mostramos nuestras virtudes con distintos filtros que esconden el miedo a sentirnos débiles. Dependientes de la comparación entre el tampoco es para tanto y el pues yo lo haría mejor. Vivimos a tientas entre lo que está por llegar y el ya lo he olvidado. Pon tu mejor cara y sonríe.

Me cansa. Me da lo mismo que la vida corra, yo pienso ir despacio. No me importa perder en las comparaciones, bajar mis likes y llegar tarde. He visto salir trenes por regatear diez minutos de sueño, me he perdido las primeras canciones en muchos conciertos y he inventado tantas excusas para ganar minutos que he perdido la cuenta. Pero no importa. Me gusta el café con leche, los abrazos lentos y las canciones largas. Me gustan las emociones sinceras, devolver el cariño y no esconder los defectos. Me gusta saborear lo que siento al cerrar los ojos. Me gusta ganar y me gusta perder, me gusta sentir que aprendo cuando todo se vuelca por dentro. Me gusta la vida que vivo aunque no se parezca en nada a la que soñé. Me gusta querer seguir viviéndola cada día. Y me gustan las despedidas a la cara, sin filtros. Cualquier hasta luego puede ser el último. Mejor tomémonos nuestro tiempo.


Dejar la manía de gastar mi energía en lo provisional 
Quererme en plena soledad 
Completarme antes de pedir más 
Perder el norte y a su gente temporal